.

Voy a ver si me encuentro dentro de mi piel y comprendo porqué nada puedo entender. Me resulta tan raro todo lo normal, me tropiezo, me caigo y vuelvo a tropezar. Creí que me había equivocado, luego pensé que: ¡ ESTOY BIEN AQUÍ, EN MI NUBE AZUL !



30 noviembre, 2018

AQUELLOS MARAVILLOSOS AÑOS


Desde hace un tiempo aquí, vengo observando que hay una especie que ha ido evolucionando progresivamente y sin que apenas nos demos cuenta, está haciendo cambiar nuestros hábitos en la ciudad.
Durante siglos, el ser humano en su infancia, siente un impulso tremendo e incontrolado de perseguir palomas. Me explico: si vas a un parque y en él se encuentra un niño de unos 2 años y una paloma, es imposible que el primero no salga corriendo tras el segundo. Si esto no sucede es debido a tres posibles razones:
-el niño aún no sabe caminar
-el niño no ha visto a la paloma
-la paloma está muerta

Bien, esta teoría se está quedando obsoleta, ya que ahora las palomas han evolucionado. Por lo menos en mi ciudad.
Antes, cuando ibas caminando tranquilamente por la acera y a lo lejos veías una paloma, ésta salía huyendo nada más estar a un metro de distancia.
Pues, esta distancia de “asustamiento”, se ha ido reduciendo de tal manera que hoy en día somos nosotros los que tenemos que dejarles paso a ellas como si de un peatón más se tratase. Y estoy convencida de que dentro de unos años, en ese parque donde antes los niños espantaban a las palomas sucederá algo así:


Imagen relacionada


No hay comentarios:

Publicar un comentario